La odisea de evitar un posible default en el mes de julio

El gobierno nacional no pago lo adeudado al Club de Paris y el cronómetro empieza a correr para evitar que Argentina entre en default.



Agustín Agüero Ninci
ninciagustin@gmail.com 


El Gobierno argentino no saldó su deuda el pasado lunes ante el Club de Paris, con un monto que asciende a los USD 2.485, después de siete años de la firma del acuerdo llevado a cabo en 2014 bajo la segunda gestión de la expresidenta y actual vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner.

 
El contrato con los países acreedores teje la posibilidad de un último plazo de sesenta días, antes de que la Argentina incurra en un evento de default de manera oficial, lo cual terminaría de sepultar a un país eternamente golpeado en términos macroeconómicos. Cabe resaltar que dicha situación en parte era predecible, ya que el Poder Ejecutivo Nacional, se relajó en la renegociación de los términos, plazos de pago y tasas de interés con el ya mencionado organismo. Desde la Casa Rosada aseguran que ahora la pelota está del lado del Fondo Monetario. Paralelamente a las gestiones ante los líderes europeos, el ministro de Economía argentino Martin Guzmán y luego el presidente Alberto Fernández, comenzaron un trabajo fino con el equipo técnico del Fondo Monetario Internacional (FMI), para acercar posiciones, aún lejos de la posibilidad de tener un programa cerrado en el corto plazo. La lectura que encaminan desde el gobierno nacional, es que no se trata de romper contratos con el Club de Paris, ya que dicho ente es un organismo multilateral “particular”, que está más guiado por los oleajes geopolíticos de cada momento que en la letra tallada en piedra de los acuerdos. Es importante tener en cuenta, que más de la mitad de la deuda argentina al Club de París está concentrada en dos países: Alemania (37%) y Japón (22%). Más atrás le siguen Holanda (casi 8%), España (6,68%), Italia (6,29%) y Estados Unidos con el porcentaje del (6,28 %), respectivamente.


Comentarios